Se buscan maestros

Publicado por Rev. Jose Peña en

Hechos 18:24-28

Apolos era un judío nacido en Alejandría, esta era una metrópolis de Egipto, se nos dice que era un hombre muy preparado, tanto en lo secular como en las escrituras, tanto en cultura como en religión.

Vemos como Dios busca hombres que tengan la disposición, alguien puede querer servir a Dios pero la preparación es indispensable, tanto en las escrituras como en educación general. Apolos pudo ser usado poderosamente por Dios porque tenía mucho material que el Espíritu Santo podía usar en el. Y esto aun antes de recibir el bautismo con el Espíritu Santo.

Pero hay una característica importante en Apolos, y es que aun cuando no tenía el bautismo en el Espíritu Santo era instruido y ferviente de espíritu. Tenía pasión por las cosas del Señor y hablaba con exactitud, también era humilde pues Priscila y Aquila lo discípularon y le enseñaron con mayor exactitud el camino de Dios.

Gracias a su actitud y fervor, gozo del favor de los discípulos en Efeso que lo respaldaron con cartas de recomendación (credenciales) para que las otras ciudades donde fuera lo recibieran como un verdadero maestro de la palabra.

La palabra de Dios nos exhorta siempre a estar preparados, todo creyente debería en algún momento de su vida convertirse en un maestro de la palabra, alguien que pueda comunicar el mensaje y las verdades del evangelio a un mundo confundido.

Muchas veces algunos rechazan la educación argumentando que solo necesitan la parte espiritual, sin embargo; vemos en la escritura lo mucho que Dios uso a los que estaban mejor capacitados, es mas Apolos demuestra que aun cuando estaba capacitado estaba dispuesto a aprender de sus nuevos maestros Priscila y Aquila.

Cuando tenemos un espíritu enseñable vamos a poder continuar creciendo, vamos a seguir avanzando en madurez y conocimiento de la palabra, pues no hay nadie que tenga la revelación completa, todos vamos siendo enseñados por el Espíritu Santo a través de otros maestros que El pone en nuestro camino, es nuestra obligación sacar provecho, tomar lo bueno de ellos y si hay algo que no esta bien simplemente dejarlo a un lado, pero siempre tomar lo bueno.

Mucha gente no cree que el maestro debe tener credenciales o debe estar en un concilio para predicar el evangelio y es cierto que no necesita, pero que bueno es, ver que Apolos llegó y cuando lo tomaron los discípulos de Pablo (el único concilio que había, pues era regulado por Jerusalén y la iglesia de Antioquía), este accedió a ser capacitado por ellos, ellos otorgaron cartas de recomendación que no es mas que lo que ahora son las credenciales, el respaldo de un grupo maduro de creyentes, que conocen la doctrina y que a través de la enseñanza capacitan a otros maestros de la palabra a fin de evitar los errores que generan falsas doctrinas y grupos sectarístas.

Oración:

Gracias Señor por los maestros que he tenido a través de mi vida, gracias porque pude tomar lo bueno de ellos, porque tu Espíritu Santo ha ido formando mi carácter y me has ido dando de la sabiduría que pusiste en ellos. Ayúdame a mi a hacer lo mismo y ser un maestro fiel a tu palabra, que pueda levantar a otros. Y sobre todo ue nunca deje de aprender, pues cada maestro de tu palabra tiene experiencias únicas que tu usas para que otros aprendamos mas. Gracias por tu paciencia y amor al enseñarnos y madurar nuestra vida hacia una que se parezca mas y mas a la de nuestro Señor Jesús.

Amén.

 


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