Tu necesidad es importante para Dios
Lucas 9:10-20
Siempre me ha parecido hermoso ver el amor y la misericordia de nuestro Señor Jesucristo, la Biblia relata muchas ocasiones donde simplemente se nos dice que “sanaba a los que tenían necesidad de ser curados” su interés no era simplemente por la salvación de ellos, también les enseñaba; pero si no tenía oportunidad, algo era seguro; no los dejaba irse enfermos. Además, tenemos aquí la alimentación de los cinco mil, otra muestra de su amor por la vida y el bienestar de las personas.
Dios conoce la necesidad de las personas y aunque el mayor interés es salvar el alma de una personas, la integridad de esa persona involucra tanto la parte espiritual como la física; a nuestro Padre le interesan ambas.
Por supuesto, si vamos a escoger, pues es mejor escoger la parte espiritual pues de todas maneras recibiremos otro cuerpo mejor que el que tenemos, verdad? La respuesta es si, pero no.
El descuidar una parte para favorecer la otra muestra una falta de mayordomía, nuestra vida y nuestro servicio a Dios en esta tierra, depende mucho de que nuestras habilidades físicas se mantengan, la salud de nuestro cuerpo, nuestra alimentación, nuestro vestir, nuestro descanso y aun nuestra alegría; todo eso y más es importante para Dios, por eso nosotros no podemos esperar que la gente que tiene gran necesidad, que están deficientes en alguna de estas áreas físicas nos pongan la debida atención.
El amor de Dios se demuestra con obras, interesándonos en las necesidades físicas, antes de poder ministrar en el área espiritual. Llegará el momento cuando les podamos hablar, mucho después que les hallamos mostrado el amor de Dios, su bondad y compasión, nos podrán escuchar mas fácil y sabrán que todo lo que nos importa es su bienestar INTEGRAL o COMPLETO.
Antes de llegar a la pregunta: ¿Ahora que te he mostrado a Jesús. Quién dices que es Jesús? Así como Jesús dijo: al Padre nadie lo ha visto, yo lo doy a conocer, podemos decir hoy en día lo mismo de Jesús. En nuestro tiempo nadie ha visto a Jesús, somos nosotros quienes lo damos a conocer, sanando y ayudando a los necesitados, para que mediante su amor nos den la oportunidad de presentarles al Salvador.
Las señales que acompañaran a los tuyos son para bienestar de las personas: “liberación de espíritus malos, protección de parte tuya y sanidad para los enfermos” Marcos 16:17
Oración:
«Amado Señor, gracias por estar interesado en mis necesidades físicas también, mi bienestar, el de mi familia, y de todas las personas.
Comprendo que muchos hay en el mundo que lo único que han tenido es mucho dolor y sufrimiento y en medio de su necesidad necesitan una luz que les alumbre, que los cubra.
Tu nos das abundancia para que sobreabunde el favor para con los necesitados, perdónanos cuando se nos olvida que lo que tenemos o recibimos no es nuestro, sino es una oportunidad de mostrar tu amor por los necesitados.
Amén.»
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