Dios conoce tus intenciones

Publicado por Rev. Jose Peña en diciembre 5, 2017

Génesis 27:30-37; 25:34

Esta historia es bien conocida, Esaú el hijo favorito de Isaac, Jacob el hijo favorito de Rebeca, y como se nos cuenta la forma que Jacob y su madre hicieron para que Isaac pasara la bendición de Abraham a su hijo Jacob.

Recordemos siempre que las bendiciones se pueden pasar pero es Dios quien confirma su pacto personal con las personas y lo hace siempre después de que ha probado nuestras intenciones y motivaciones.

Esaú en 25:34 se nos dice que desprecio su primogenitura, esto significa; TODO lo que viene envuelto con ella, es decir; derechos, bendiciones, herencia, etc., Esaú demuestra desde un principio que no le importaban tanto o era tan inmaduro que no lo sabía, además es un mentiroso al decir que su hermano le había robado algo que el mismo entregó.

Quizás Jacob tuvo que recurrir a artimañas para reclamar lo que ya era suyo, pero el no estaba robando nada, solo que sabía que tenía todo en contra, su padre no se la daría pues su favorito era Esaú y por eso al final hace lo que tenga que hacer aun arriesgándose a las consecuencias (el odio, venganza, enemistad y oposición).

Hay algo que noto desde un principio, Esaú era tan peludo que con pegarle la piel de los cabritos a Jacob pudieron hacer que pareciera Esaú. El olor de Esaú era tan fuerte y fácilmente reconocible por Isaac.

Jacob que sabía que no iba a recibir mucha bendición pues su padre favorecía a Esaú, pudo RECONOCER LA OPORTUNIDAD de negociar la primogenitura, ¿Cómo sabía que Esaú no la quería?

Era mas importante la carne para Esaú; pero para Jacob las bendiciones hay que luchar por ellas, aún a pesar de las consecuencias. La ceguera de Isaac hizo posible que todo funcionara: los pelos y el olor, podemos ver que Dios permitió que Isaac se quedará ciego, Dios hizo tan peludo a Esaú, Dios le dio ese olor a Esaú, a fin de darle las oportunidades a Jacob.

Dios nos prepara las oportunidades de acuerdo a las motivaciones y nuestras intenciones para con El, esta en nosotros verlas y tomar ventaja de ellas. Como dice la palabra: “Todas las cosas ayudan a bien a los que aman a Dios, a los que conforme a SU PROPOSITO son llamados”.

Quizás Esaú tenía un propósito diferente, quizás quería ser grande y famoso, eso no le servía a Dios para sus propósitos, el corazón de Jacob era mas adecuado para poseer la bendición y el pacto de Dios con Abraham.

Dios busca corazones sinceros y sencillos que puedan recibir sus pactos, que no desprecien sus bendiciones, que puedan ser de bendición a todas las naciones de la tierra. Lucas 10:21-22 dice que Dios oculta estas cosas de los sabios y se las da a conocer a los que son como niños.

Oración:

«Amado Señor, gracias por la oportunidad de leer, estudiar y aprender cada día mas de Ti. El placer mas grande en nuestra vida es poder conocerte y aprender a obedecerte y agradarte, gracias por todas las oportunidades que ya tienes preparadas para mi, ayúdame a reconocerlas y apoderarme de tus bendiciones.

Peleare por mis bendiciones, pues todo lo que viene de Ti, vale mucho más que cualquier cosa que podamos obtener, gracias por que se que conoces mi corazón.

Amén.»